01 Sep Biotecnología Agrícola Trabajando En Pro De La Salud Humana
Con los años la visión de salud a nivel mundial cambia de forma impresionante, derrotando millones de mitos dando paso a nuevas alternativas, una teoría innovadora es que los microbios manejan nuestro cuerpo como un hábitat y no son precisamente enemigos, por lo tanto convivimos con ellos todos los días y son necesarios para realizar funciones criticas y proporcionar acciones vitales, de por si estos microorganismos superan en número a las células humanas de diez a una.
Por primera vez gracias a la tecnología se sabe cuál es la secuencia genética microbiana del ser humano, te preguntarás ¿Para qué sirve esto? Al conocer cuáles bacterias, hongos y virus ayudan a mantener al cuerpo en equilibrio es más fácil crear productos que apoyen su bienestar e integridad.
En pocas palabras podemos cultivar comida más rica en nutrientes y saludable, desarrollar fármacos llenos de gérmenes amables y espacios adaptados a nuestra anatomía, es muy cierto que las bacterias en exceso pueden causar estragos pero al conocer su composición y en qué cantidades son favorables los riegos se reducen exponencialmente, el punto de apoyo más grande para las siete mil millones de personas en el planeta tierra está bajo nuestros pies, es el suelo vivo donde cultivamos los alimentos que son fuente de vida y salud, al usar mejoradores de suelo a base de microorganismos estamos apoyando el bienestar de millones de personas con productos de calidad.
Del mismo modo que hemos destruido sin querer microbios vitales en el intestino humano por el uso excesivo de antibióticos y alimentos altamente procesados, hemos devastado imprudentemente la microbiótica del suelo mediante el uso excesivo de ciertos fertilizantes químicos, fungicidas, herbicidas, pesticidas, materia orgánica y labranza pesada.
Estos microorganismos del suelo en particular las bacterias y hongos reciclan los nutrientes y agua a las plantas, cultivos y diversos alimentos, podríamos decir que funcionan como “estómagos” formando relaciones simbióticas con las raíces de las plantas, al mismo tiempo digieren y proporciona nutrientes de nitrógeno, fosforo y otros en una forma que las células de las plantas pueden asimilar.
La buena noticia es que los mismos avances tecnológicos que nos permiten mapear microbios en el cuerpo humano ahora ayudan a comprender, aislar y reintroducir especies de microbios en el suelo, apoyando la reparación y daño de comunidades microbianas sanas las cuales sostienen nuestras cosechas y proporcionan alimentos nutritivos, ahora es mucho más fácil mapear secuencias genéticas de los microorganismos del suelo, ayudando a entender lo que realmente hacen y cómo cultivarlas para posteriormente reintroducirlos de nuevo a la madre tierra.
Desde la década de 1970 se han comercializado bacterias agrícolas en las tiendas de jardinería, pero la mayoría de productos eran caros y fueron en gran medida limitados a la horticultura y cultivos hidropónicos, debido a las nuevas tecnologías de secuenciación y producción genéticas hoy en día es posible identificar y hacer crecer bacterias aplicándolas efectivamente en la agricultura a gran escala, es posible producir estos fertilizantes orgánicos y añadirlos a la soja, maíz, verduras u otros cultivos de semillas para crecer y nutrir las plantas.
La función de los biofertilizantes no es solo nutrir las plantas también tienen un sistema de resistencia ante patógenos, es posible compararlo con las funciones que tienen los microorganismos en el cuerpo humano ayudando en la digestión de nutrientes y combatiendo patógenos mediante el sistema inmunológico. Un estudio reciente realizado en Reino Unido demostró que las plantas de tomate enfermas utilizan la red subterránea filamentosa de micorrizas para advertir a las plantas de tomate sanas, a su vez activan sus defensas antes de ser atacado a sí mismos, por lo tanto este agente microbiano sería totalmente protector.
Las bacterias son la base de una cadena que se llama “vida”, son capaces de proporcionar alimento y protección a las plantas que cumplen una función sumamente importante en el ecosistema, siendo críticas para la supervivencia humana ya que sin oxigeno no podríamos sobrevivir otorgándole un alcance enorme a estos seres invisibles y diminutos.
Por muchos cálculos el suelo es uno de los elementos más valiosos de la tierra entonces ¿Por qué no invertir en él?, ahora estamos en un punto donde los microbios que prosperan en suelos sanos han sido en gran medida eliminados en la mayoría de las tierras agrícolas comerciales, no son capaces de hacer lo que han hecho por cientos de millones de años para acceder, conservar y reciclar los nutrientes más agua para las plantas, por lo tanto es necesario intervenir usando biofertilizantes, la mitad de las tierras habitables del mundo no se cultivan, estamos perdiendo suelo y materia orgánica a un ritmo alarmante, los estudios demuestran un cercano agotamiento del suelo a nivel global con el tiempo y estancamiento grave en cuanto a rendimiento de cultivos.
El uso de fertilizantes químicos se ha convertido en una de las mayores causas de la inestabilidad climática, siendo responsable hasta de un tercio de todas las emisiones de gases con efecto invernadero de origen humano, esto representa más que todo el humo dañino emitido por coches y camiones en el sector del transporte a nivel mundial.
El futuro sostenible y saludable tiene fundamento bajo nuestros pies con el suelo vivo donde cultivamos nuestros alimentos, además de las bacterias y hongos el suelo también está lleno de protozoos, nematodos, ácaros y microartrópodos, existen entre 10.000 y 50.000 especies en menos de una cucharadita de suelo, en ese misma cucharilla de tierra hay más microbios que personas en el mundo ¿Imaginas esto? en un puñado de suelo la palabra biodiversidad se hace presente.
Así como los animales están en peligro de extinción también millones de microbios que desempeñan un papel clave en nuestra salud, mediante el uso de mejoradores de suelo existe la esperanza de conservarlos con bien, necesitamos de estos diminutos socios para ayudar a construir un sistema agrícola sostenible, estabilizar el clima y mantener nuestro propio bienestar.
La agricultura ha dado un paso enorme desde el uso de fertilizantes dañinos hasta la biotecnología agrícola, afortunadamente cada día existen más negocios para la reintroducción de microorganismos al sueño para granjas pequeñas y agroindustrias a gran escala, por otro lado esta técnica ahorra muchísimo dinero aumentando el rendimiento de producción agrícola, lo más importante es que el producto final es de calidad y contribuye no solo a la salud de millones de persona también con el medio ambiente.
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