¿Cómo afecta el cambio climático a la agricultura mundial?

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El continuo aumento de las emisiones de gases con efecto invernadero ha aumentado la temperatura de la atmósfera terrestre de forma impresionante, dando lugar a la fusión de glaciares, patrones de lluvia impredecibles y otros fenómenos meteorológicos extremos.

El ritmo acelerado del cambio climático combinado con la población global y agotamiento de los recursos agrícolas amenaza la seguridad alimentaria en todo nuestro planeta tierra, estudios realizados en los últimos años indican que el aumento de la temperatura media dará lugar a los siguientes (3) tres fenómenos:

  • Aumento de la productividad agrícola en las regiones templadas de latitudes altas, debido a la prolongación de la temporada de crecimiento.
  • Reducción de la productividad agrícola en latitudes bajas específicamente en regiones subtropicales y tropicales, donde el calor del verano ya de por si limita la productividad.
  • Índices bajos de productividad debido al aumento en las tasas de evaporación del suelo.

Se ha demostrado que los cambios en los patrones de lluvia y su cantidad afectan las tasas de erosión del suelo y humedad del mismo que son importantes para el rendimiento de los cultivos, las precipitaciones aumentan en las latitudes altas mientras se reducen en la mayoría de las zonas subtropicales y se aproxima que este fenómeno se dará en un 20% dando lugar a períodos de sequía largos.

Pero no todo es malo el aumento de las concentraciones atmosféricas de CO2 impulsan el crecimiento de algunos cultivos, aunque otros aspectos del cambio climático como las altas temperaturas y alteraciones del clima pueden contrarrestar cualquier efecto beneficioso del aumento de los niveles de CO2, todo depende de la zona, tipo de cultivos y hasta latitud del lugar.

Los niveles de contaminación en el ozono troposférico son capaces de dañar el tejido vivo y descomponer ciertos materiales, este aumenta debido a las emisiones de CO2 conduciendo así a temperaturas más altas que compensarán el aumento del crecimiento en cultivos resultantes de niveles más altos de CO2.

Sin hablar que los cambios en la frecuencia y severidad de las olas de calor, sequías, inundaciones y huracanes siguen siendo un factor clave incierto que influye potencialmente en la agricultura, además en algunos casos suele conducir a la aparición de nuevas plagas y enfermedades.

Casi el 60% de la población mundial depende de la agricultura para su sustento y por lo tanto será probablemente la más afectada con los terribles cambios climáticos actuales.

Para mitigar estos efectos las prácticas agrícolas actuales necesitan ser modificadas e innovadoras con estrategias de adaptación, la finalidad es producir alimentos eficientemente en situaciones de tensión y con una reducción neta de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Contribución de los cultivos transgénicos

La biotecnología agrícola ofrece una solución para reducir los efectos dañinos del efecto invernadero, de por si el uso de cultivos transgénicos y bacterias agrícolas ha reducido significativamente las emisiones de CO2 en los últimos 16 años, permitiendo a los agricultores usar menos energía, productos químicos, secuestrar el carbono del suelo y apoyar al 100% el medio ambiente.

Los cultivos transgénicos son tolerantes a los herbicidas y no requieren el uso de labranza lo que reduce significativamente la pérdida de carbono del suelo (secuestro de carbono) y las emisiones de CO2, de esta forma se reducen el consumo de combustible y la erosión del suelo.

Además  este tipo de cultivo es resistente a insectos necesitando menos pesticidas en aerosol que se traduce en un ahorro de combustible del tractor / fósiles y por lo tanto menos emisiones de CO2, agregado a esto el índice de enfermedades respiratorias y de la piel se reduce en los agricultores que están sometidos constantemente a químicos y agentes tóxicos de los pesticidas y fertilizantes prefabricados.

Cultivos biotecnológicos adaptados al cambio climático

Este tipo de cultivo puede ser modificado más rápido a través de la biotecnología que los cultivos convencionales, acelerando de esta forma la aplicación de estrategias para cumplir con los cambios climáticos rápidos y severos.

Las plagas resistentes a los cultivos biotecnológicos se han desarrollado continuamente a medida que nuevas enfermedades surgen con los cambios del clima, los mejoradores de suelo también han sido una gran herramienta ya que aíslan bacterias agrícolas no patógenas para contribuir con la nutrición y crecimiento de diversos tipos de cultivos.

Actualmente se están realizando estudios para crear herramientas que apoyen la producción de cultivos tolerantes a la salinidad, sequía, frío y calor para que muchos factores externos no interfieran con la alimentación sostenible de millones de personas.

Se espera mejorar los cultivos resistentes a ambientes extremos causados por el cambio climático dentro de los próximos años, por lo tanto, la producción de alimentos durante esta época debe dar un nuevo impulso a mantener la oferta para la población que constantemente se duplica.

Las investigaciones biotecnológicas para mitigar el calentamiento global también se iniciaron con la finalidad de utilizar nuevos productos, entre ellas se encuentra una muy novedosa que se enfoca en la inducción de estructuras nodulares en las raíces de los cultivos de cereales no leguminosos para fijar nitrógeno, esto reducirá la dependencia de los agricultores a fertilizantes inorgánicos.

Otra es la utilización de un exceso de CO2 en el aire en cultivos básicos de arroz mediante la conversión de la capacidad de captación, ya han realizado diferentes pruebas y el maíz ha resultado ser el alimento más exitoso para este procedimiento.

Indudablemente la madre tierra nos está dando un mensaje con cada una de sus acciones que denominados fenómenos o desastres naturales, hemos utilizado infinidad de recursos pensando que nunca se acabaran cuando esto se aleja bastante de la realidad, debemos tomar más consciencia y usar métodos que apoyen al 100% el medio ambiente creando tecnologías sostenibles en el tiempo.

Si es posible usar la biotecnología orgánica a nuestro favor ¿Por qué no hacerlo? Empezar a utilizar bacterias agrícolas, mejoradores de suelos y cultivos seleccionados podría ser el comienzo de una nueva era en la agricultura sin precedentes.

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